Una forma de agregar detalles a tus trabajos con arcilla polimérica es a través de la transferencia de imágenes. Es una posibilidad para personalizar tus piezas con diseños que pueden ser de fabricación propia o que consigas navegando en la red. En las siguientes líneas te vamos a contar el paso a paso para hacer estas transferencias sobre laminas de arcilla polimérica. Comencemos!
No todas las arcillas permiten trabajar con transferencia de imágenes debido a que utilizaremos agua y esto puede afectar la consistencia de la arcilla y el resultado que obtengas no será óptimo. En aquellas arcillas que el tiempo de horneado es de 110°C, como FIMO, puede que tengas algunos inconvenientes al utilizar agua para hacer la transferencia y el diseño no quede tan nítido. Por otro lado las que son de mejor consistencia como CERNIT o SCULPEY, no tendrás mayores inconvenientes en hacer la transferencia utilizando agua.
Lo que vamos a hacer es preparar nuestra arcilla, acondicionándola y estirándola sobre nuestra superficie de trabajo. puedes usar el color que tu desees aunque resaltan mucho mejor las transferencias sobre colores claros, como blanco, beige, crema, ecru, amarillo sol o similares. Posteriormente tenemos que preparar nuestro diseño a transferir, puede ser una imagen impresa en papel o una imagen impresa en una lámina de transferencia especial para arcilla polimérica. Aquí tenemos que hacer una acotación importante: en caso de usar una imagen impresa en papel, lo recomendable es que sea una impresión láser o una copia en fotocopiadora para obtener un buen resultado de transferencia. En ocasiones (y en base a mi experiencia) la tinta de una impresora de inyección de tinta no funciona muy bien y no es lo recomendable para esta técnica.
Vamos a colocar la imagen sobre la lámina de arcilla polimérica y presionamos suavemente para asegurarnos que está en contacto directo con la superficie y no quedaron burbujas de aire. Posteriormente vamos a mojar suavemente la imagen para que se vaya empapando el papel. De esa forma será mucho más fácil retirar la impresión de la arcilla. Con una herramienta como una espátula o un palo de amasar, vamos a frotar suavemente la imagen sobre la arcilla para que se pueda transferir la tinta de la imagen a la arcilla.
Completado este paso, vamos a retirar cuidadosamente el papel. Esto puede llevarte un poco de tiempo por lo que no te apresures en retirar el motivo de la lámina de arcilla. Verás que la tinta se habrá transferido a la arcilla y el papel se puede retirar fácilmente. Si es una lámina de transferencia especial (que se venden en varias tiendas), sigue las instrucciones del fabricante para obtener los mejores resultados.
Antes de cocinar nuestra pieza en el horno, debemos dejar que la arcilla polimérica con la imagen transferida se seque por completo. Esto puede tardar algunos minutos, dependiendo del tipo de imagen que estamos usando, su tamaño y la cantidad de agua usada. Si lo deseas puedes ayudarte con un paño para ir secando el posible excedente de agua que quedó en la arcilla que ayudará a que el papel se pueda retirar más rápido.
Ahora solo debemos cocinar nuestra pieza de arcilla siguiendo los lineamientos del fabricante. No te preocupes por el motivo impreso, éste quedara fijado a la arcilla y no cambiara de color si cocinas la arcilla a la temperatura indicada por el fabricante. Posteriormente puedes aplicar algún sellador como esmaltes o resina uv que además de darle brillo le aplica una capa protectora para tus piezas y así no se desgasten con el tiempo
Recuerda que puedes experimentar diferentes imágenes para obtener piezas únicas. Aquí te contamos el paso a paso par que puedas comenzar a aplicar esta técnica a tus futuras creaciones.