La arcilla polimérica no seca al contacto con el aire y eso es una gran ventaja respecto a otros productos como la arcilla común o la porcelana fría. Sin embargo debemos tener presente que cuanto mejor la conservemos, podremos acondicionarla más fácilmente, sin necesidad de utilizar suavizantes líquidos y acondicionadores en pasta. A continuación te dejamos algunos consejos prácticos para evitar que se reseque o endurezca mientras no estas trabajando con ella.
Nunca la dejes sin protección
Como dijimos al comienzo, la arcilla no se seca al contacto con el aire. Sin embargo dejar la arcilla sin protección puede ocasionar que se reseque un poco y cuando tratemos de trabajarla esté dura y se desmigaje al tratar de amasarla.
Para evitar esto, es recomendable que siempre la protejas con bolsas plásticas, recipientes de madera o cualquier elemento que tengas en tu casa para así evitar que se reseque y se endurezca.
Mantenerla alejada del calor
Siempre que no estemos trabajando con el material, debemos evitar dejarla expuesta a lugares calurosos o que las temperaturas superen los 30°C. Mantener SIEMPRE la arcilla lo más alejada posible de la luz solar y o fuentes de energía de casa (como pueden ser calentadores o lámparas de gran luminiscencia). Si la arcilla se expone al calor de ambiente y/o lugares con temperatura elevadas durante un tiempo prolongado, es probable que se endurezca un poco y eso nos obligue a tener que reacondicionarla para trabajarla.
En estación de verano, si el lugar donde trabajas es muy caluroso, puedes optar por conservar tu arcilla en el refrigerador mientras no la estés utilizando. Esto permitirá que se mantenga fresca y cuando vuelvas a trabajar con ella, la puedas moldear con tus manos fácilmente. Simplemente cuando vuelvas a utilizarla, retírala del refrigerador y déjala reposar unos minutos para que tome un poco de temperatura ambiente.
Utiliza Nylon o bolsas plásticas Ziploc
Otra buena opción es resguardar la arcilla que no vayamos a utilizar en recipientes de nylon transparentes o también las bolsas plásticas con sellado. Además de brindar protección contra impurezas tales como polvo, pelos de mascota y demás, son un buen aislante y mantienen la arcilla fresca para volver a utilizarla cuando quieras.
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Recuerda que siempre puedes consultar las especificaciones que proporciona el fabricante y siempre estarán detalladas en el envoltorio de cada arcilla.
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